Las fibras para hormigón existen en numerosas variantes. Los materiales de fibra más conocidos son acero o plástico, aunque también existen fibras de basalto, vidrio, carbono y materias primas naturales renovables. Las fibras para hormigón están disponibles en el mercado como alternativa a la armadura de acero clásica desde hace aproximadamente 50 años. En todos los casos en los que el acero en barra o la armadura de malla no pueden cumplir por sí solos los requisitos de comportamiento de carga de los elementos de hormigón, las fibras para hormigón pueden ser el mejor aliado. Hay algo que tienen todas las fibras en común: si se utilizan correctamente, mejoran las propiedades mecánicas del hormigón.
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