Revistas Especializadas para la Industria del Hormigón

El ensayo de escurrimiento es desde hace casi un siglo la única posibilidad práctica para determinar la procesabilidad del hormigón. Con el paso del tiempo y debido a su sencillez, la medición del asentamiento/escurrimiento, que originalmente se desarrolló para comprobar la con- sistencia en la producción de hormigón, se convirtió por sí misma en una importante «propiedad del hormigón». Lamentablemente, el ensa- yo de escurrimiento solo describe la procesabilidad del hormigón en la medida en que, desde el punto de vista reológico, está estrechamente relacionada con la tensión de flujo. Lo que falta y no puede determinarse de forma fiable ni con asentamiento/escurrimiento ni con otras pruebas simples es la viscosidad plástica. La combinación de las dos propiedades reológicas principales, la tensión de flujo y la viscosidad plástica, ofrece un amplio espectro de propiedades del hormigón fresco. Comprender y dominar estas propiedades permite la concepción de mezclas de hormigón de mayor rentabilidad y rendimiento, el diseño de estructuras de hormigón más complejas y mejorar los procesos de trabajo en la construcción con hormigón. La comprobación y la validación de las propiedades del hormigón fresco (procesabilidad) son y con- tinuarán siendo los factores decisivos para el control de calidad en la cadena de suministro de hormigón y un elemento importante de las regulaciones contractuales y legales. La reología del hormigón ya no es solo un tema de los científicos, pero aún deberán sortearse con- siderables obstáculos hasta que logre ocupar el lugar que merece en las obras de construcción con hormigón.